La Camelia Sinensis, más conocida como la planta del té, es originaria del sur de China y del sur de Asia, si bien es cierto que hoy en día se cultiva en diferentes regiones de todo el mundo, incluso en las tropicales y subtropicales. De la misma cabe mencionar que se trata de una de las 50 hierbas más importantes empleadas en la medicina tradicional china, de la que cada vez adquirimos más hábitos.
Hay muchas leyendas sobre el origen del café. Sin embargo, si preguntas a un historiador de dónde proviene el café, la respuesta unánime es Etiopía. De hecho, desde allí viajó hasta Asia y después Europa.
El dato del origen del café es algo que sorprende a muchas personas, teniendo en cuenta que hoy día, los cafés más famosos proceden de América Latina, siendo el de origen Colombia uno de los más reclamados por los amantes del buen café.
Pero si el café surge en Etiopía y luego viaja a Asia y Europa, ¿cómo llegó el café a Colombia? Aunque aquí también hay varios datos, se sabe que fueron los sacerdotes jesuitas quienes introdujeron el grano de café en el país, procedentes de Venezuela, en el siglo XVIII. Tendría que pasar un siglo hasta que el país comenzará a exportar este producto.
Volviendo a nuestra tierra, la historia del café en España es bien distinta. Si te estás preguntando quién trajo el café a España, la respuesta la tienes cerca: fueron los italianos a mediados del siglo XVIII. Y, ¡ojo! Porque no sólo lo trajeron, sino que también abrieron los primeros cafés en las ciudades de San Sebastián, Madrid, Barcelona, Sevilla y Cádiz.
Qué fueran los italianos quiénes lo trajeron a España no es de extrañar teniendo en cuenta que el origen de los maestros baristas más famosos de Europa nos lleva hasta su tierra, sin olvidar el nombre de muchas preparaciones de café, que también tienen origen italiano. Pero, ¿cuál es la historia del café en Italia?
Se dice que el café llegó al país alpino desde el norte de África en el siglo XVII. Fue en Venecia donde se empezó a comercializar el café y desde ahí se expandió al resto del país y más tarde a otros países de Europa, hasta llegar a América.
Teniendo en cuenta la historia del café en el mundo, resulta curioso que hoy en día, los cafés más apreciados del mundo tengan su origen en América Latina, siendo éste producto uno de los mayores portadores económicos de países como Guatemala o Venezuela, los cuáles comenzaron a exportar este producto a finales del siglo XIX.
Y si antes te he hablado del origen del café en Colombia, probablemente te estés preguntando cuál es el origen del café en Guatemala o en Venezuela. En ambos casos, todo se debe a los monjes franciscanos, quienes introdujeron sus semillas en estas regiones del continente americano; sin duda, una de las mejores tierras para este tipo de cultivo, tal y como demuestran todos los premios que reciben el grano de café que se cultivan en las mismas.
Pero si hay un tipo de café que está teniendo gran acogida hoy en día, ese es el café organico, es decir, aquel que sin la ayuda de sustancias químicas artificiales. ¿Por qué? Dos son los motivos principales: porque es un café de calidad y porque es más respetuoso con el medio ambiente, contribuyendo a tener suelos más fértiles y productivos.
Para ello, la planta del café, el cafeto, se cultiva a la sombra de otros árboles más grandes, de manera que se genera humedad, clave para sea de mayor calidad.
Por supuesto, si hablamos de orígenes del café, no podemos olvidarnos del café asiático. Entre sus propiedades cabe mencionar que son enérgicos, de cuerpo denso y sabor terroso. En estas tierras crece una de las variedades más veneradas y caras del mundo: el Kopy Luwak.
